Cada uno de nosotros somos SERES ÚNICOS e
irrepetibles.
Cada uno poseemos unas fortalezas
especiales que son nuestro abanico de cartas para jugar el juego de la vida.
Es por eso que existe tanta riqueza y
diversidad de formas de vida y de caminos a transitar.
Aquí la cuestión es, que sólo seremos felices, sólo nos sentiremos
a gusto si seguimos nuestro camino, no el que siguen otros, no el que el que
los otros quieren que sigamos, ha de ser EL NUESTRO.
Todos los caminos van al mar, pero el
camino que nos lleva a nuestra felicidad es sólo uno, único y especial.
¿ Cómo conoceremos que estamos en nuestro
camino?
Aquí vuelve a intervenir el
sentimiento. Cuando lo consigamos sentiremos que la emoción
aflora, que nuestro corazón late de júbilo, que a pesar de las dificultades nos
mueve la energía del entusiasmo
Antes de llegar aquí, seguro que hemos
transitado o transitaremos otros muchos caminos, pero si reflexionamos, nos daremos cuenta que los recorríamos sin
certezas, sin convicción, sin entusiasmo.
Por diversos que sean los caminos a
seguir y las personas que los siguen, todos hemos de pasar antes, como
requisito indispensable, la misma revalida: CONOCERNOS A NOSOTROS MISMOS.
Hemos de conocernos, para aceptarnos tal y como somos. Aquel ser que no se conoce, no acepta sus limitaciones y deficiencias . Tampoco conoce sus fortalezas, su singularidad... .No asume que no es como los demás y sobre todo, que no tiene que ser como los demás, ni lo que los demás esperan de él. Ese ser vive en un conflicto interno permanente que le impide ser feliz.
Tiene miedo a encarar la realidad y cree que es más cómodo seguir así, sin hacerse más planteamientos.
Hemos de conocernos, para aceptarnos tal y como somos. Aquel ser que no se conoce, no acepta sus limitaciones y deficiencias . Tampoco conoce sus fortalezas, su singularidad... .No asume que no es como los demás y sobre todo, que no tiene que ser como los demás, ni lo que los demás esperan de él. Ese ser vive en un conflicto interno permanente que le impide ser feliz.
Tiene miedo a encarar la realidad y cree que es más cómodo seguir así, sin hacerse más planteamientos.
Conocerse y aceptar ser "uno mismo" no
es tarea fácil, a veces lleva años. Son muchas capas a traspasar para desnudar
al personaje que durante tanto tiempo venimos representando, pero si queremos,
mejor dicho SI SENTIMOS la necesidad de hacerlo, lo conseguiremos.
